El papa Francisco visitará Cuba en septiembre venidero y con este sumarán tres los pontífices que han estado en la Isla en 17 años. El Papa vendrá a Cuba y luego seguirá hacia Estados Unidos, donde se prevé pronuncie un discurso ante la Asamblea de Naciones Unidas, en Nueva York, una entrevista con el presidente Barack Obama y participará en el Encuentro Mundial de las Familias, en Filadelfia, señalaron autoridades eclesísticas.
En menos de dos décadas a Cuba habrían viajado los tres máximos representantes de la iglesia católica cuando se realice el paso por aquí del papa Francisco, quien además llega a esta nación en medio del proceso que Cuba y Estados Unidos impulsan para restablecer las relaciones diplomáticas, rotas por más de 50 años.
El Sumo Pontífice saludó el pasado 17 de diciembre la decisión de ambas naciones de iniciar el dílogo por las relaciones diplomáticas y ofreció su apoyo a las iniciativas que desde ambos países se emprendan en ese sentido.
La primera visita de este tipo se efectúo en 1998 con Juan Pablo II, quien recorrió cuatro provincias cubanas: La Habana, Santa Clara, Camaguuml;ey y Santiago de Cuba.
A su llegada fue recibido por el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, y en las principales plazas de esas localidades miles de creyentes y no creyentes asistieron a sus misas.
La ciudad de Santa Clara, ubicada en el centro del país, acogió su primera misa, en la que cerca de 150 000 personas estuvieron presentes.
En Camaguuml;ey, se congregaron unas 200 000 personas y en la homilía de la Santa Misa el papa Juan Pablo II llamó a todos los jóvenes, creyentes y no creyentes, a ser virtuosos, fuertes por dentro y grandes de alma.
En su tercer día de visita coronó la imagen de la virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, durante la misa que ofició en la plaza Antonio Maceo, de la ciudad oriental de Santiago de Cuba.
A su cuarta y última misa en la nación caribeña asistió Fidel Castro y tuvo por escenario la Plaza de la Revolución de esta capital.
Al despedir al Papa, Fidel Castro expresó: Me conmueve el esfuerzo que Su Santidad realiza por un mundo más justo. Los estados desaparecerán; los pueblos llegarán a constituir una sola familia humana. Si la globalización de la solidaridad que usted proclama se extiende por toda la Tierra y los abundantes bienes que el hombre puede producir con su talento y su trabajo se reparten equitativamente entre todos los seres humanos que hoy habitan el planeta, podría crearse realmente un mundo para ellos, sin hambre ni pobreza; sin opresión ni explotación; sin humillaciones ni desprecios; sin injusticias ni desigualdades, donde vivir con plena dignidad moral y material, en verdadera libertad, iexcl;ese sería el mundo más justo! Sus ideas sobre la evangelización y el ecumenismo no estarían en contradicción con él".
En visita pastoral a Cuba llegó en marzo de 2012 el papa Benedicto XVI para celebrar aquí el 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la virgen de la Caridad del Cobre. Benedicto XVI ofició en este país dos misas, en las ciudades de Santiago de Cuba y La Habana.
El presidente Raúl Castro, junto a autoridades del país asistieron a la misa de La Habana, en la Plaza de la Revolución, nuevamente cientos de miles de cubanos escucharon los mensajes del Papa quien abogó por la paz y la unidad.
Desde la visita de Benedicto XVI quedó establecido en Cuba el Viernes Santo como día de celebración, luego de una solicitud suya.
Fidel Castro y Benedicto XVI se reunieron en la sede de la Nunciatura Apostólica poco después de concluida la multitudinaria misa que ofició en la Plaza de la Revolución. La prensa nacional e internacional reseñó que intercambiaron sobre temas ecológicos, culturales, científicos, religiosos y sobre los graves problemas que aquejan a la humanidad. En sus palabras de despedida al Papa, el presidente cubano, Raúl Castro, apuntó que Cuba ha tenido como su principal objetivo la dignidad plena del ser humano. Somos conscientes de que esta no solo se construye sobre bases materiales, sino también sobre valores espirituales, como la generosidad, la solidaridad, el sentimiento de justicia, el altruismo, el respeto mutuo, la honradez y el apego a la verdad".
Conferimos suprema importancia a la familia, favorecemos todo lo que la enaltece y privilegiamos el papel de los padres en la educación de los hijos. Cuidamos de la niñez como nuestra mayor esperanza y alentamos a la juventud, sin ningún paternalismo, a la participación libre y creadora en las realizaciones de nuestra sociedad", agregó.
Al confirmar la visita del papa Francisco, el canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, aseguró que recibirá aquí la más cálida hospitalidad, en tanto destacó que su predicación para erradicar la pobreza en el mundo suscita la admiración de todos".